Las preocupaciones y la ansiedad sobre COVID-19 y su impacto pueden ser abrumadoras. El distanciamiento social hace que todo sea aún más complejo.
Es posible que la pandemia de la COVID-19 haya provocado muchos cambios en la manera en que vives tu vida, y en ocasiones, incertidumbre, rutinas diarias alteradas, presiones económicas, y aislamiento social. Quizás te preocupes por enfermarte, por cuánto tiempo durará la pandemia, por si tu trabajo se verá afectado, y sobre el futuro. El exceso de información, los rumores y la información errónea pueden hacer que te sientas sin control y que no tengas claro qué hacer.
Durante la pandemia de la COVID-19, se puede experimentar estrés, ansiedad, miedo, tristeza, y soledad. Es posible que empeoren los trastornos de salud mental, que incluyen la ansiedad y la depresión.
Por lo tanto, es importante aprender estrategias para el cuidado personal.
Medidas de autocuidado
Las medidas de cuidado personal son buenas para tu salud física y mental, y pueden ayudarte a tomar control de tu vida. Cuida tu cuerpo y tu mente, y conéctate con otros para beneficio de tu salud mental.
Presta atención a tu salud física:
Cuida tu cuerpo
- Duerme lo suficiente.
- Haz actividad física de manera regular.
- Come de manera saludable.
- Evita el tabaco, el alcohol y las drogas ilícitas.
- Limita el tiempo frente a las pantallas.
- Relájate y recarga energías. Reserva tiempo para ti mismo. Unos pocos minutos de tranquilidad pueden ser reconfortantes y ayudar a calmar la mente y a reducir la ansiedad.
Cuida tu mente
Reduce los desencadenantes de estrés:
- Mantén tu rutina habitual. Mantener un horario diario habitual es importante para tu salud mental. Además de mantener una rutina habitual a la hora de acostarte, ten horarios regulares para preparar las comidas, bañarte, vestirte, trabajar o estudiar, y hacer ejercicio. Asimismo, dedica algún tiempo para hacer actividades que disfrutes. Esta previsibilidad puede hacerte sentir que tienes más control.
- Limita la exposición a los medios de comunicación. Las noticias constantes sobre la COVID-19 en todos los tipos de medios de comunicación pueden intensificar el miedo a la enfermedad. Limita el uso de redes sociales que puedan exponerte a rumores e información falsa. Asimismo, evita leer, escuchar o mirar otras noticias, pero infórmate frecuentemente sobre las recomendaciones nacionales y locales.
- Mantente ocupado. Las distracciones saludables pueden alejarte del ciclo de pensamientos negativos que alimentan la ansiedad y la depresión. Disfruta de pasatiempos que puedas hacer en casa, como leer un libro, escribir en un diario, hacer manualidades, jugar o cocinar una nueva receta.
- Concéntrate en los pensamientos positivos. Elige enfocarte en las cosas positivas de tu vida, en lugar de hacerlo en lo mal que te sientes. Considera comenzar cada día con una lista de las cosas por las que estás agradecido.
- Usa tus valores morales o tu vida espiritual como apoyo. Si tus creencias te dan fuerza, pueden brindarte consuelo en momentos difíciles y de incertidumbre.
- Establece prioridades. Fija metas razonables todos los días y haz un esquema de los pasos que puedes seguir para lograrlas. Date crédito por cada paso que des en la dirección correcta, sin importar lo pequeño sea, y acepta que algunos días serán mejores que otros.
Conéctate con otros
Organiza tu red de apoyo y haz tus relaciones más sólidas:
- Forma conexiones. Encuentra un momento cada día para establecer conexiones virtuales por correo electrónico, mensajes de texto, teléfono o por videollamada.
- Haz algo para los demás. Encuentra un propósito al ayudar a las personas que te rodean. Ayudar a los demás es una excelente manera de ayudarnos a nosotros mismos. Por ejemplo, envía correos electrónicos o mensajes de texto, o llama para ver cómo están tus amigos, familiares, y vecinos, especialmente los que son adultos mayores. Si sabes de alguien que no puede salir, pregunta si necesita algo, como hacer compras o ir a buscar un medicamento con receta.
- Brinda apoyo a un familiar o amigo. Si un familiar o un amigo necesita hacer cuarentena en su casa o en el hospital debido a la COVID-19, piensa en maneras de permanecer en contacto. Por ejemplo, puedes hacerlo con dispositivos electrónicos o el teléfono, o enviarle una nota para alegrarle el día.
Pide ayuda cuando la necesites
Esperar que los problemas de salud mental, como ansiedad o depresión, desaparezcan por sí solos puede llevar a que los síntomas empeoren. Si estás preocupado, o si notas que los síntomas de salud mental empeoran, pide ayuda cuando la necesites y sé sincero sobre cómo te sientes.